¿Cuáles son los Modelos de Educación Sexual Integral?
De sobra sabemos que toda educación sexual es pedagógicamente importante pues en toda práctica se despliegan de manera explícita e implícita. Una serie de sentidos que condensan modos de entender y vivir nuestra sexualidad. Ahora bien si la sexualidad atraviesa todo acto educativo revisemos los modos en que todo acto educativo que se hace presente y los significados que cada practica desliza.
Modelos de Educación Sexual Integral ESI
- Modelo biologista: es el modelo con mayor pregnancia en el sistema educativo, en tanto entiende la sexualidad en su dimensión estrictamente biológica. Prevalece una concepción de “Lo natural” de la sexualidad por lo que las prácticas de enseñanza se circunscriben a la materia de “biología” en temas como “aparatos reproductores” y “fecundación”.
- Modelo biomédico: se centra en el abordaje de los riesgos de la sexualidad o efectos no deseados (como embarazos, ITS) este enfoque deja de lado tanto las practicas socioculturales en que la sexualidad se inscribe, como los efectos deseables o buscados a convertir la sexualidad en una amenaza.
- Modelo moralizante: se constituye un discurso sobre sexualidad desde una imagen ideal (deber), que se rige como norma para calificar conductas y determinar su licitud o “abyección” en función de su distancia respecto del modelo.
- Modelo jurídico: pone el foco en la normativa que ampara los derechos de niños y niñas y adolescentes a fin de concientizarlos sobre sus derechos y que puedan identificar situaciones de vulneración, ahora bien, si solo se le aborda desde esta perspectiva nuevamente se convierte a la sexualidad en una amenaza de la que hay que cuidarse.
Como vemos, cada uno de estos enfoques plantea una dimensión que efectivamente forma parte de la sexualidad pero ninguno de la cuenta Educación Sexual Integral ESI.
La integralidad de la ESI nos exige pensarla en clave relacional, evitando justamente los discursos cerrados, las parcializaciones y simplificaciones que terminan por reproducir formas hegemónicas de vivir y concebir la sexualidad.
Definición de conceptos
Es de suma importancia que dentro de la ESI podamos tener y usar terminología para darle el enfoque políticamente correcto y acertado.
Sexo: es la diferencia en características biológicas de hombres y mujeres que está determinado por los genes de una persona.
Sexualidad: es la forma en que las personas experimentan y se expresan como seres sexuados. Es el resultado de la interacción de factores biológicos, psicológicos, socioeconómicos, culturales, éticos, religiosos o espirituales. Basada en el sexo, incluye: el género, las identidades
de sexo y género, la orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva y el amor, y la reproducción.
Salud sexual: es la experiencia del proceso permanente de consecución del bienestar físico, psicológico y sociocultural relacionado con la sexualidad, que requiere un entorno libre de coerción, discriminación y violencia.
Salud reproductiva: es un estado continuo
de bienestar físico, mental y social en todos
los aspectos relacionados con el sistema reproductivo, sus funciones y procesos. Entraña la capacidad de disfrutar de una vida sexual satisfactoria y sin riesgos, y de procrear, y la libertad para decidir hacerlo o no hacerlo, cuando y con qué frecuencia.
Promoción de la salud: es el proceso que permite a las personas incrementar su control sobre los determinantes de la salud y en consecuencia mejorarla. En este sentido, constituye un proceso político y social global que abarca no solamente las acciones dirigidas directamente a fortalecer las habilidades y capacidades de las personas, sino también las dirigidas a modificar las condiciones sociales, ambientales y económicas, con el fin
de mitigar su impacto en la salud pública e individual.
Información sexual: (cómo funciona el cuerpo y cómo se deben prevenir situaciones que pueden generar problemas de salud), que son datos recibidos pero sin crítica ni asimilación.
Educación sexual: (desarrollar y favorecer las aptitudes y actitudes en la interrelación entre las personas en una sociedad determinada), que son datos recibidos que potencian la reflexión y el análisis anticipatorio, evitando el predominio de la acción irreflexiva sobre el pensamiento lógico.
Educación sexual formal: consiste en la planificación de los procesos de aprendizaje directa e indirectamente relacionados con el patrón de conducta y experiencias sexuales,
así como con el patrón de valores sociales o culturales relativo a la sexualidad, y se realiza fundamentalmente a través del sistema educativo y sanitario.
Educación sexual informal: es un proceso por el cual se enseña y aprende, sin que se planee
o dirija de forma consciente, y que se recibe tanto en la familia como por los medios de comunicación de masas y a través del grupo de iguales de edad.
Modelos de educación sexual: En función de
los conceptos que una determinada sociedad y cultura tiene de la educación y de la sexualidad, se establece un modelo de educación sexual coherente con los mismos, que preserva y perpetúa dichos conceptos. Paralelamente a la evolución de las concepciones sobre la sexualidad a lo largo de las diferentes épocas históricas,
se han ido elaborando modelos de educación sexual coherentes con sus creencias acerca de la sexualidad.
Modelo moral: Nace como reacción de las instituciones conservadoras a las otras formas de hacer educación sexual. Defiende que la sexualidad solamente es legítima dentro del matrimonio heterosexual y con fines exclusivamente reproductivos. Sus principales objetivos son fomentar la abstinencia como único método seguro y fortalecer el carácter y la voluntad para no sucumbir al sexo antes del matrimonio.
Modelo de riesgos: Se basa en el entendimiento de la salud como la mera ausencia de enfermedad, por lo que la sexualidad sólo merece atención cuando hay algún problema o cuando existe un riesgo de enfermedad o contagio. Sus principales objetivos son el evitar los problemas de salud derivados de la actividad sexual, así como, las consecuencias personales, sociales y económicas que provocan.
Modelo integrador: Se basa en un concepto positivo de salud en general y salud sexual en particular, entendiendo ambas como elementos indispensables para la promoción del bienestar personal y la calidad de vida de todas las personas, así como en la promoción de actitudes erotofílicas hacia la sexualidad. El marco de referencia es el configurado por los derechos humanos, los derechos sexuales, los derechos de la mujer, los derechos de la infancia, así como las diferentes normativas internacionales.
Género: se refiere a diferencias en los roles sociales, atributos y comportamientos que las sociedades y las familias esperan de los hombres y mujeres. El género no es lo mismo que las diferencias biológicas por sexo.
Identidad: es la forma en que las personas piensan de sí mismas, o se describen a sí mismas ante otras personas. La forma en que las personas se identifican a sí mismas puede cambiar con el tiempo.
Identidad sexual: incluye la manera como la persona se identifica como hombre o mujer, o como una combinación de ambos, y la orientación sexual de la persona.
Identidad de género: define el grado en que cada persona se identifica como masculina o femenina o alguna combinación de ambas. Es el marco
de referencia interno, construido a través del tiempo, que permite a los individuos organizar
un autoconcepto y a comportarse socialmente en relación a la percepción de su propio sexo y género.
Roles sexuales: son los papeles asignados a hombres y mujeres por la sociedad, condicionando las formas en que las personas expresan socialmente su sentimiento de identidad. No son innatos sino que se aprenden, variando entre las culturas y con el paso del tiempo.
Normas sociales: son las expectativas sobre cómo deben actuar o pensar las personas en una comunidad. Las normas varían de lugar a lugar y a través del tiempo. Las normas sociales influyen en las actitudes y comportamientos de las personas.
Valores: se refiere al conjunto de creencias o convicciones que gobiernan lo que las personas consideran como correcto o equivocado. Los valores varían entre los individuos, las familias y las culturas. Algunos valores, son aceptados virtualmente y en forma universal como característicos del comportamiento ético del ser humano.